Adicción digital: La nueva enfermedad de una sociedad dependiente de Internet

CREDITO DE IMAGEN:
Crédito de la imagen
iStock

Adicción digital: La nueva enfermedad de una sociedad dependiente de Internet

Adicción digital: La nueva enfermedad de una sociedad dependiente de Internet

Subtítulo de texto
Internet ha hecho que el mundo esté más interconectado e informado que nunca, pero ¿qué sucede cuando las personas ya no pueden desconectarse?
    • Escrito por:
    • Nombre del autor
      Previsión Quantumrun
    • 1 de noviembre.

    La adicción digital, en particular el trastorno de adicción a Internet (IAD), está afectando al 14 por ciento de la población mundial. Los impactos disruptivos y las implicaciones de la DIA incluyen el deterioro de la salud física, la reducción de la productividad en el lugar de trabajo y los sistemas de salud sobrecargados. Sin embargo, podría estimular el crecimiento de las industrias del bienestar digital e impulsar cambios en las prácticas educativas, las estrategias ambientales y las políticas regulatorias.

    Contexto de adicción digital

    El trastorno de adicción a Internet, aunque aún no está reconocido oficialmente en el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, ha atraído una atención significativa en la comunidad médica, particularmente entre organizaciones como los Institutos Nacionales de Salud de EE. UU. Esta institución estima que el 14 por ciento de la población mundial tiene adicción a Internet. En términos generales, este trastorno se manifiesta como una dependencia abrumadora de los dispositivos con acceso a Internet, lo que compromete en consecuencia la capacidad de un individuo para administrar su tiempo de manera efectiva, realizar tareas en el trabajo o mantener relaciones saludables en el mundo real. 

    Para comprender y abordar mejor este problema generalizado, el Centro de Adicciones ha identificado cinco formas principales de adicción digital: adicción al cibersexo, compulsión a la red, adicción a las relaciones cibernéticas, búsqueda compulsiva de información y adicción a las computadoras o los juegos. La adicción al cibersexo y la adicción a las ciberrelaciones se caracterizan por una fijación poco saludable en actividades o relaciones sexuales en línea, respectivamente, a menudo a expensas de las interacciones en el mundo real. La compulsión en la red abarca una variedad de comportamientos, incluidas las compras excesivas en línea y los juegos de azar, mientras que la búsqueda compulsiva de información se refiere a una necesidad obsesiva de mantenerse constantemente actualizado con información o noticias en línea. 

    Varias investigaciones sugieren que estos comportamientos adictivos pueden estar relacionados con cambios en la estructura del cerebro, lo que puede conducir a una disminución de la capacidad de concentración. Por ejemplo, un estudio realizado por el Departamento de Radiología del Hospital Ren Ji en Shanghai destacó que los adolescentes con DAI tenían significativamente más anomalías en la materia blanca del cerebro en comparación con los sujetos de control. Estas anomalías se asociaron con la generación y el procesamiento emocional, la atención ejecutiva, la toma de decisiones y el control cognitivo, todos los cuales pueden verse afectados significativamente por la adicción digital. 

    Impacto disruptivo

    Las investigaciones han demostrado que el uso excesivo de Internet puede conducir a conductas sedentarias, lo que resulta en obesidad, problemas cardiovasculares y problemas musculoesqueléticos relacionados con una mala postura. Además, puede alterar los patrones de sueño, provocar fatiga crónica y afectar aún más la capacidad de concentrarse y realizar las tareas diarias. Estos problemas de salud física, combinados con problemas de salud mental como la depresión y la ansiedad, pueden resultar en una disminución de la calidad de vida a largo plazo.

    Además, las empresas pueden enfrentar desafíos de productividad cada vez mayores a medida que la IAD se vuelve más frecuente entre los empleados. A una persona que lucha contra la adicción digital puede resultarle difícil mantenerse concentrado en las tareas laborales debido a la necesidad compulsiva de consultar las redes sociales, los sitios de compras en línea o los juegos. Los empleadores deberán desarrollar nuevas estrategias para gestionar este problema, posiblemente ofreciendo programas de bienestar digital.

    Es posible que los organismos gubernamentales también deban reconocer las implicaciones sociales a largo plazo de la adicción digital generalizada. Este trastorno podría empeorar el desempleo o el subempleo, ya que las personas luchan por mantener sus empleos debido a su dependencia de Internet. Además, el sistema sanitario puede enfrentarse a una mayor carga a medida que más personas buscan tratamiento para problemas de salud física y mental asociados con este trastorno. 

    Como medida preventiva, los gobiernos podrían intentar introducir programas educativos en las escuelas para enseñar a los niños sobre los peligros potenciales del uso excesivo de Internet, o podrían regular el diseño de interfaces digitales adictivas. Un modelo a considerar es Corea del Sur, que ha sido proactiva en reconocer y abordar la adicción digital, implementando medidas como la Ley de Cierre, que restringe el acceso de los jóvenes a los juegos en línea durante las horas nocturnas. 

    Aplicaciones para la adicción digital 

    Las implicaciones más amplias de la adicción digital pueden incluir: 

    • La industria del videojuego se ve obligada a incorporar el bienestar digital en sus juegos.
    • Psicólogos y psiquiatras desarrollan tratamientos específicos para diferentes tipos de adicción digital.
    • Se regulan las plataformas de redes sociales para garantizar que sus aplicaciones no contribuyan a la dependencia de Internet.
    • Mayor demanda de plataformas de terapia online y servicios de asesoramiento especializados en adicción digital, que utilizan aprendizaje automático y algoritmos de inteligencia artificial para adaptar los tratamientos a las necesidades individuales.
    • Las escuelas incorporan cursos de bienestar digital y seguridad en Internet en sus planes de estudio, lo que lleva a una generación más consciente y resiliente contra la adicción digital. 
    • Nuevas leyes laborales o regulaciones laborales con reglas estrictas sobre el uso de Internet durante el horario laboral o períodos obligatorios de desintoxicación digital.
    • Un aumento de industrias centradas en el bienestar digital, como aplicaciones que promueven la reducción del tiempo frente a la pantalla o empresas que ofrecen retiros de desintoxicación digital. 
    • Ciclo acelerado de rotación de dispositivos, que conduce a un aumento de los desechos electrónicos y requiere estrategias efectivas de reciclaje de desechos electrónicos.
    • Gobiernos que implementan políticas que limitan el diseño de interfaces digitales adictivas o proporcionan financiación para programas de investigación y tratamiento relacionados con la adicción digital.

    Preguntas para comentar

    • ¿Crees que las empresas de tecnología deberían priorizar la inclusión del bienestar digital en sus aplicaciones y sitios? ¿Por qué o por qué no?
    • ¿Qué medidas toma para asegurarse de no volverse adicto a Internet?

    Referencias de información

    Se hizo referencia a los siguientes enlaces populares e institucionales para esta perspectiva: