Posibles consecuencias de la sobrecarga de información en el cerebro humano
Posibles consecuencias de la sobrecarga de información en el cerebro humano
En un mundo de sobrecarga de información, ¿cómo procesamos qué conocimientos son relevantes y cuáles no? Para responder a esta pregunta, primero debemos echar un vistazo al órgano principalmente responsable de la cognición de esa información.
El cerebro humano es un órgano complejo. Toma información de múltiples entradas o sentidos, que luego generan una cadena de reacciones eléctricas y químicas que el cerebro interpreta. Con el tiempo, y en varias ubicaciones geográficas, las cosas a las que los humanos prestan atención conscientemente en sus entornos cambian de acuerdo con sus necesidades de supervivencia.
Trabajar con exceso de información
En la sociedad contemporánea disponemos de más información que la que hay en nuestro entorno o entorno inmediato. En general, tenemos más información disponible para usar que nunca antes. Quizás ya no sea eficiente, necesario o incluso posible procesar con precisión qué conocimiento es relevante (o podría serlo en el futuro) y qué no lo es.
En un mundo de sobrecarga de información, debemos aprender a encontrar varios tipos de información. En un sentido metafórico, en lugar de que nuestras mentes sean un libro abierto, nuestro procesamiento intelectual y cognición se beneficiarán mejor al averiguar qué llave abrirá la puerta de la biblioteca. A medida que evolucionan las plataformas a través de las cuales se presenta la información, el tipo de información útil evoluciona y la importancia de recordar ciertos tipos de información se deteriora, ¿cómo se verá afectado nuestro futuro?