Impuesto al carbono para los países en desarrollo: ¿Pueden las economías emergentes permitirse el lujo de pagar por sus emisiones?

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Impuesto al carbono para los países en desarrollo: ¿Pueden las economías emergentes permitirse el lujo de pagar por sus emisiones?

Impuesto al carbono para los países en desarrollo: ¿Pueden las economías emergentes permitirse el lujo de pagar por sus emisiones?

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Se están implementando impuestos fronterizos al carbono para alentar a las empresas a reducir sus emisiones de carbono, pero no todos los países pueden pagar estos impuestos.
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      Previsión Quantumrun
    • 27 de noviembre.

    Resumen de información

    El Mecanismo de Ajuste de Carbono en Frontera (CBAM) de la Unión Europea tiene como objetivo nivelar el campo de juego de las emisiones de carbono, pero podría penalizar inadvertidamente a las naciones en desarrollo que carecen de los medios para una descarbonización rápida. Dado que las naciones desarrolladas posiblemente obtengan 2.5 millones de dólares en ingresos adicionales gracias a un impuesto al carbono, los países en desarrollo podrían sufrir una pérdida de 5.9 millones de dólares, desafiando sus posiciones económicas y de mercado. Esta disparidad desafía el principio de responsabilidades diferenciadas en la acción climática, lo que sugiere la necesidad de estrategias adaptadas que reconozcan las diferentes capacidades y niveles de desarrollo. Las consecuencias más amplias para las economías en desarrollo pueden incluir la contracción de la industria, la pérdida de empleos y un impulso hacia la colaboración regional para obtener exenciones, junto con una posible afluencia de apoyo extranjero e inversión en tecnología verde.

    El contexto del impuesto al carbono en los países en desarrollo

    En julio de 2021, la Unión Europea (UE) publicó una estrategia integral para acelerar la reducción de las emisiones de carbono. El Mecanismo de Ajuste de Carbono en Frontera (CBAM) es un intento de estandarizar la fijación de precios del contenido de carbono en toda la región, independientemente de dónde se fabrican los productos, mediante la imposición de impuestos fronterizos. El reglamento propuesto cubre en primer lugar el cemento, el hierro y el acero, el aluminio, los fertilizantes y la electricidad. Si bien parece una buena idea gravar a las corporaciones por cualquier emisión de carbono generada por sus procesos de fabricación y operación, no todas las economías pueden permitirse esa carga.

    En general, los países en desarrollo no tienen la tecnología ni los conocimientos necesarios para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Son los que más perderán porque las empresas de estos territorios tendrán que retirarse del mercado europeo porque no pueden cumplir con las regulaciones del impuesto al carbono. Algunos expertos piensan que las economías en desarrollo pueden presentar una petición a la Organización Mundial del Comercio (OMC) para obtener algunas exenciones y protección de este arancel. Otros sugieren que organizaciones regionales como la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) pueden trabajar juntas para compartir los costos administrativos y negociar para que los ingresos del impuesto al carbono vayan a las industrias locales en lugar de a las autoridades extranjeras.

    Impacto disruptivo

    ¿Cuáles son los efectos de los impuestos al carbono en los países en desarrollo? La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), agencia de comercio de las Naciones Unidas, estima que con un impuesto de 44 dólares por tonelada de carbono, las naciones desarrolladas tendrán ingresos adicionales por valor de 2.5 millones de dólares, mientras que las economías en desarrollo perderán 5.9 millones de dólares. Las economías en desarrollo de Asia y África tienen menos capacidad para emprender costosas reducciones de emisiones. También tienden a estar más expuestos a los riesgos climáticos, lo que significa que pueden ganar más con los esfuerzos de reducción de emisiones a largo plazo. Sin embargo, en el corto plazo, es posible que tengan pocos incentivos para cumplir con medidas que podrían impactar significativamente sus economías. Otra razón para la resistencia es que los países en desarrollo pueden perder participación de mercado en las economías desarrolladas, ya que un impuesto al carbono encarecería los productos de los países en desarrollo. 

    Este desequilibrio no se ajusta al principio de responsabilidad común pero diferenciada y capacidades respectivas (CBDR-RC). Este marco establece que los países avanzados deben tomar la iniciativa para abordar el cambio climático, dadas sus grandes contribuciones al problema y sus tecnologías superiores para abordarlo. En última instancia, cualquier impuesto al carbono impuesto debería tener en cuenta los diferentes niveles de desarrollo y capacidad entre los países desarrollados y en desarrollo. No es probable que un enfoque único que sirva para todos consiga que todos los países se unan a la tarea de frenar el cambio climático.

    Implicaciones más amplias de un impuesto al carbono para los países en desarrollo

    Las posibles implicaciones de un impuesto al carbono para los países en desarrollo pueden incluir: 

    • Las empresas manufactureras y de construcción de las economías en desarrollo pierden ingresos debido a la disminución de su participación en el mercado global. Esto también puede provocar desempleo en estos sectores.
    • La UE y otras naciones desarrolladas extienden apoyo, tecnología y capacitación a las economías emergentes para ayudar a reducir sus emisiones de carbono.
    • Los gobiernos de las economías en desarrollo incentivan a sus industrias locales a invertir en investigación de tecnologías verdes, incluida la concesión de subvenciones y la obtención de financiación de la comunidad internacional.
    • Organizaciones económicas regionales se unen para presionar por exenciones en la OMC.
    • Algunas industrias intensivas en carbono aprovechan posibles exenciones del impuesto al carbono para las economías emergentes y trasladan sus operaciones a estos países.

    Preguntas para comentar

    • ¿Cómo se pueden hacer los impuestos al carbono más equitativos para las economías en desarrollo?
    • ¿De qué otra manera pueden las naciones desarrolladas ayudar a las economías emergentes a reducir sus emisiones de carbono?

    Referencias de información

    Se hizo referencia a los siguientes enlaces populares e institucionales para esta perspectiva: