La última herramienta para quemar grasa

Siempre se culpa a las calorías por hacer que nuestra ropa sea más ajustada y nuestras decisiones de comida rápida más pesadas; se han convertido en nuestros enemigos en el gimnasio. Sin embargo, la ciencia puede recuperar la reputación de las calorías en el futuro. Investigadores del Instituto del Cáncer Dana-Farber y de la Universidad de California, Berkeley, han tomado nota de las células que pueden quemar calorías y expulsarlas en forma de calor en lugar de almacenarlas como grasa para su uso posterior.

Una enzima en las células de los ratones, PM20D1, finalmente se acumula lo suficiente como para provocar que se produzca un aminoácido, N-acilo, dentro del cuerpo. El N-acilo, cuando está presente en los procesos metabólicos, requiere la ingesta de glucosa, pero no produce trifosfato de adenosina (ATP). El ATP normalmente se almacena como una fuente para que el organismo acceda a la energía.

En el caso de estas nuevas células, la ausencia de ATP hace que las células necesiten encontrar energía rápidamente de una fuente diferente. Las células marrones, o células con coloración oscura debido a la gran cantidad de mitocondrias, son los tipos específicos de células que llamaron la atención de los científicos de Dana-Farber y UC, Berkeley. Dado que estas células marrones carecen de ATP, fueron reconocidas por su capacidad para quemar calorías de la grasa primero, a fin de acceder rápidamente a la energía para los procesos metabólicos. Mientras se quema la grasa, se libera calor como producto de desecho y no se almacena en el cuerpo para su uso posterior. Como las células marrones necesitan constantemente acceder a la energía, pero no fabrican ATP, las células deben confiar en la grasa como medio principal para obtener energía rápidamente. Cuando la grasa se utiliza antes, el cuerpo no tiene la oportunidad de retenerla para más adelante.

Eso requirió mucha energía para explicarlo. La buena noticia es que podemos relacionarlo con nuestra vida diaria. Cuando comemos y digerimos pasta, por ejemplo, nuestro cuerpo busca energía para usar en nuestros procesos metabólicos. Dado que los carbohidratos (en la pasta) son los más fáciles de descomponer para el cuerpo, se convierten en la forma más conveniente y atractiva para que nuestros cuerpos accedan a la energía. De manera similar, las células con N-acilo dependen de la quema de calorías de la grasa como la forma más rápida y eficiente de obtener energía cuando no hay ATP.